Las mejores ‘Calaveritas’ de la sátira mexicana a políticos: Peña Nieto y Donald Trump

La calaverita literaria es una composición en verso, una tradición muy mexicana que se realiza en la víspera del día de los muertos. Según la historia, varios años atrás eran conocidos como “panteones.” Estos versos nacieron en el siglo XIX como forma de epitafio burlesco y como modo de expresar ideas, sentimientos o conceptos en forma de sátira que en otras oportunidades sería más difícil expresarle específicamente alguna persona, para bien o para mal. Por lo mismo, eran frecuentemente censuradas o destruidos ya que, por lo anterior, muchas veces servían como medio para expresar descontento con los políticos de la época.

Las primeras calaveritas impresas se publicaron en 1849, en un periódico bajo el nombre “El Socialista” de Guadalajara. Son muy típicos durante el día de los muertos, se hacen concursos con los mejores versos, en las escuelas o trabajos para posteriormente colocarlas en el altar de muertos que se acostumbra en esta celebridad netamente mexicana. La catrina es la imagen típica que acompaña a la calaverita, creada por José Guadalupe Posada y bautizada e inmortalizada por el muralista Diego Rivera.

Elva Ester Gordillo:

Elva Esther ¡Satán te quiere llevar!
A su apogeo infernal,
Tu corte de cabello no le es muy grato
y menos tu sonrisa fingida
¡Ya no corras ya pronto llegara Satán!
Si quieres salvarte ponte a rezar,
ó de una vez empieza a empacar

¿Cómo se hace una calaverita? Primeramente son versos irreverentes, escritos a modo de epitafios, retratando a las personas como si estuvieran muertas. Se utilizan para canalizar sentimientos que en otro contexto sería difícil expresar y finalmente suelen acompañarse de dibujos de calaveras.